Departamento de Libertad Religiosa

En 1901, se organiza el Departamento de Asuntos Públicos y Libertad Religiosa. A nivel mundial ha representado a la Iglesia Adventista del Séptimo Día ante gobiernos, organismos religiosos y organizaciones internacionales. A través del apoyo, protección y defensa de la libertad religiosa y los derechos humanos para todas las personas en cualquier lugar, este departamento es vocero de la Iglesia en asuntos públicos y comparte los valores Adventistas de libertad de adoración y creencias.

Dirigiendo congresos, conferencias y otros eventos alrededor del mudo para promover la libertad religiosa, el diálogo interconfesional y derechos humanos, este Departamento ayuda a desarrollar el entendimiento entre oficiales de gobierno y dirigentes religiosos de todas las creencias.

Promueve y mantiene la libertad religiosa, con especial énfasis en la libertad de conciencia. La libertad de conciencia incluye el derecho humano a practicar o adoptar la religión que la persona prefiera, cambiar sus creencias religiosas de acuerdo con su conciencia, así como expresar sus creencias religiosas individualmente o en comunidad con otros creyentes en la adoración, la observancia, la práctica, el testimonio y la enseñanza, sujeto todo lo anterior al respeto por los derechos de los demás.

Para salvaguardar la libertad religiosa, este departamento incentiva, siempre que sea posible, la separación de la Iglesia y el Estado, tal como lo recomendó nuestro Señor Jesucristo cuando dijo: “Dad, pues, a César lo que es de César, y a Dios, lo que es de Dios” (Mat.22:21).

La oficina de la Iglesia Adventista del Séptimo Día encargada de la Libertad Religiosa es la PARL (Public Affairs & Religious Freedom)

Para más información entre al sitio web del IRLA (Asociación Internacional de Libertad Religiosa)